NO A LA DEROGACION DE LA LEY 25.542
En Resistir al neoliberalismo. Comunidades y autonomías Pilar Calveiro no se centra en las características del neoliberalismo sino, como su nombre lo indica, en la posibilidad y la potencia de las resistencias comunitarias. Para ello retoma la discusión sobre los rasgos violentos y autoritarios del neoliberalis mo, desarrollados en textos anteriores, enfatizando ahora en la conformación de redes de poder que rebasan al aparato estatal. Ello obliga a desplazar el foco de análisis, del Estado y sus responsabilidades directas o indirectas, a la gubernamentalidad neoliberal, como una trama más densa y compleja. Se trata de observar la articulación de las redes de poder legal/ilegales y público/privadas que, en el neoliberalismo, ejecutan diversas violencias orientadas a desarrollar verdaderas políticas del miedo. Las desprotección social, así como las distintas violencias inherentes al neoliberalismo, genera miedos difusos, que se dirigen intencionalmente hacia el Otro —migrante, terrorista, indígena, criminal— y se utilizan como mecanismo de control poblacional. Las prácticas de desposesión, propias de este modelo, echan mano del miedo eincluso del terror para consumar sus objetivos de muerte.
En Resistir al neoliberalismo. Comunidades y autonomías Pilar Calveiro no se centra en las características del neoliberalismo sino, como su nombre lo indica, en la posibilidad y la potencia de las resistencias comunitarias. Para ello retoma la discusión sobre los rasgos violentos y autoritarios del neoliberalis mo, desarrollados en textos anteriores, enfatizando ahora en la conformación de redes de poder que rebasan al aparato estatal. Ello obliga a desplazar el foco de análisis, del Estado y sus responsabilidades directas o indirectas, a la gubernamentalidad neoliberal, como una trama más densa y compleja. Se trata de observar la articulación de las redes de poder legal/ilegales y público/privadas que, en el neoliberalismo, ejecutan diversas violencias orientadas a desarrollar verdaderas políticas del miedo. Las desprotección social, así como las distintas violencias inherentes al neoliberalismo, genera miedos difusos, que se dirigen intencionalmente hacia el Otro —migrante, terrorista, indígena, criminal— y se utilizan como mecanismo de control poblacional. Las prácticas de desposesión, propias de este modelo, echan mano del miedo eincluso del terror para consumar sus objetivos de muerte.